Amenazaba tormenta, pero no por ello iniciamos nuestro Día Mundial de la Chaîne con menos entusiasmo en el Bailiato de España. Cogimos un chubasquero y un paraguas y nos dispusimos a disfrutar de un gran día fuera de casa…
A las 9,00h de la mañana nos montamos en el autobús contratado para la ocasión y nos pusimos en camino hacia tierras extremeñas, concretamente hacia la población de Jerte (Cáceres). El pueblo se sitúa en el curso alto del río del que toma su nombre, a unos 600 metros de altitud. Su singular encanto deriva del atractivo paisaje donde se enmarca: está rodeado de huertos, prados cercados y bancales poblados de árboles frutales dispuestos en abruptas laderas.
En ese idílico paraje paramos a tomar un café y a sacar las primeras instantáneas de nuestro pequeño viaje. Admiramos la belleza de su paisaje, donde miles y miles de cerezos con sus flores intentaban abrirse paso en primavera. ¡No nos llovió, íbamos bien!
Continuamos hacia Plasencia. Allí nos esperaba Isabel (nuestra anfitriona del restaurante Casa Juan) junto a Ismael, el guía que nos iba a acompañar por el casco histórico de la ciudad.
Plasencia fue fundada por Alfonso VIII en 1186. El nombre de la ciudad viene del lema que aparecía en el escudo: Ut placeat Deo et hominibus (para agradar a Dios y a los hombres). Nos dirigimos hacia el sur, por la Plaza de San Esteban para llegar a la Plaza de la Catedral, en la que se encuentran las dos catedrales de Plasencia. La Catedral Vieja sigue un estilo de transición del románico al gótico. En la Plaza de la Catedral pudimos ver la Casa del Deán, del siglo XVII.
Hacia el norte nos encontramos con la Rua Zapatería, que lleva hacia la Plaza Mayor y en el otro sentido a la Iglesia de San Nicolás, de estilo románico. Junto a la iglesia se encuentra el Palacio Renacentista de los Marqueses de Mirabel (o Palacio de Mirabel), del siglo XV, uno de los edificios con más atractivos de Plasencia. Al lado está el antiguo Convento de San Vicente Ferrer, convertido en el Parador de Plasencia, que tiene en su interior un bonito claustro renacentista del siglo XV.
Seguimos hacia el oeste, junto al Hospital Provincial Santa María, y nos encontramos la Casa-Palacio de los Monroy, también llamada de las Dos Torres, del siglo XIII. Es el palacio más antiguo de Plasencia, de fachada románica.
Finalizamos nuestro recorrido en la Plaza Mayor. La Plaza Mayor es el centro de la vida de la ciudad. Allí se encuentra el Palacio Municipal (Casa Consistorial), edificado en el siglo XVI siguiendo un estilo gótico renacentista y en la torre del campanario se encuentra uno de los símbolos de la ciudad: el Abuelo Mayorga.
Acabado el recorrido (que nos supo a poco), nos dirigimos al restaurante CASA JUAN, uno de los restaurantes de referencia en Plasencia, y, como no podía ser de otra manera, miembro de la Chaîne des Rôtisseurs. El alma del restaurante son Juan (en la cocina) e Isabel (en sala), que para la ocasión nos habían preparado un menú especial fusión extremeño-sefardí que hizo las delicias de los asistentes, consistente en los siguientes platos:
PARA COMPARTIR:
- Milhojas de pimientos asados con mermelada de tomate y boquerones
- Rulo de cabra gratinado con patatera
A CONTINUACIÓN:
- Trenza de pescado con berenjenas a la miel
- Cochinillo confitado
POSTRE:
- Repápalos en leche de arroz
BEBIDA:
- Vinos extremeños, crianza cavernet souvignon y blanco verdejo
Terminamos el almuerzo con un café y una copa y un regalo que nos hizo nuestra Presidenta Rosa Román a los asistentes, consistente en una botella de vino, todas diferentes, cada una con una denominación de origen distinta.
Fue un día de risas y buen humor, una jornada de disfrute generalizado. Así nos volvimos a Madrid, entonando un VIVE LA CHAÎNE! y en espera de una próxima aventura para seguir disfrutando de la vida y de la gastronomía.